Osario (II): Las Tierras de la Nigromancia

Ciudades

Aunque existen muchas poblaciones más pequeñas, casi todas ellas dedicadas a la agricultura y la ganadería, predominan seis de ellas, estas ciudades son las creadas entorno a las torres de la Nigromancia. Cada una de estas ciudades actúa como administradora de una provincia salvo Nuar’tal’reg que es la capital de la nación. De todas ellas solo vamos a detallar aquí dos de ellas. En futuros suplementos se irá expandiendo la información sobre cada una de ellas.

Por’Nuar

La más meridional de todas las torres y ciudad portuaria de gran importancia, es el punto de entrada de las mercancías que llegan desde Marlidán y otros lugares con los que tienen acuerdos comerciales. Eso no significa que los barcos de otros lugares lleguen aquí, es más bien lo contrario, para mantener la discreción estos viajes comerciales son realizados por la propia flota mercante de Osario.

Tanto la flota mercante como la militar tienen su base aquí en Por’Nuar, sin embargo todos estos barcos son construidos en otro lugar, en Nuar’Artú. Sus astilleros están siempre trabajando, con un método bastante curioso de construcción, combinan la madera que consiguen en el Bosque Oscuro junto con huesos de grandes animales que han aparecido en una mina de la Cordillera del Muro.

Precisamente este trasiego mercantil hace que la ciudad tenga un continuado movimiento, los retornados son usados como mano de obra para el transporte de dichas mercancías. No solo humanoides, los nigromantes alzan los cadáveres de animales de gran tamaño y con ellos transportan las mercancías hasta las diferentes ciudades. Por lo que ver estas caravanas en los caminos es muy frecuente, a veces es una visión espeluznante, pero también extraña y hasta maravillosa.
En Por’Nuar se pueden encontrar gentes de muchos lugares diferentes, la mayoría atraídos por la posibilidad de estudiar en la torre de nigromancia ya sea solo por el conocimiento o el poder que pueden conseguir. Otros son peregrinos que vienen a visitar la tierra de su dios Osrun, o bien quieren entrar al servicio de alguno de los templos. Aunque en muchos lugares el culto a Osrun está prohibido y suele ser perseguido por las autoridades, el dios de los muertos vivientes tiene seguidores en todo el continente. Estos seguidores traen a sus hijos al cumplir los seis años para que hagan las pruebas y ver si tienen la posibilidad de entrar al servicio de su dios ya sea como mago o clérigo. Por’Nuar es la ciudad de entrada para todos estos fieles.

Información General

Gobierno: El gobernador es un semielfo llamado Kerym Illitran, y es el clérigo de Osrun al cargo de la orden en la ciudad. Su ascenso a gobernador no fue fácil, a pesar de contar con el favor de Halmana Aimterr tuvo que eliminar a sus competidores con sutiles artimañas. A algunos los alejó de Osario con misiones y a otros, podríamos decir, que murieron plácidamente en sus camas.

Otros centros de poder: La oposición al gobierno de Kerym es Ruoi Zaabo, un mago nigromante maestro en la escuela de magia de la torre. Ruoi ascendió al puesto cuando el anterior maestro murió de viejo en su cama, todo apuntaba a que el uso continuado de las energías negativas afectó tanto a su cuerpo que nunca pudo recuperarse. Sin embargo, Ruoi sabe que fue eliminado por Kerym y busca la forma de vengarse para, de paso, hacerse con el gobierno.

Población: Es una gran metrópoli con más de 40.000 habitantes. La ciudad está situada en una zona de tierra rica llena de cultivos, trabajados por miles de muertos vivientes bajo el control de los agricultores. El puerto no solo es la entrada de mercancías de lugares lejanos, también es un importante puerto pesquero con una flota importante que explota el mar de los muertos.

Guardia: La ciudad cuenta con cerca de cuatro mil hombres para la defensa de la ciudad y el mantenimiento de la ley, además cuenta con un puerto militar enorme que es la base para la flota de Osario.

Nuar’tal’reg

Es la mayor ciudad de Osario y su capital. La torre de la nigromancia que aquí se erige fue la primera en ser construida, aunque decir que las torre fueron construidas es un eufemismo. Esta torre también es llamada por sus habitantes la Torre de Marfil debido a los grandes huesos y cornamentas de enormes bestias que se pueden ver como materiales para su construcción. Alrededor de la torre se ha levantado la ciudad que va creciendo con el paso del tiempo y la llegada de nuevos estudiantes.
Al contrario de lo que se pueda pensar Nuar’tal’reg es una ciudad luminosa, de grandes avenidas y edificios bien cuidados. Sus calles bullen con el movimiento de personas de un lado a otro, el comercio y los estudiantes, muy lejos de ser personas consumidas por el odio y la nigromancia. Pero también tiene sus callejones poco iluminados y un submundo de movimientos más oscuros. Es en estos callejones donde se hace la política secreta, se pactan las alianzas y se ordenan las muertes, detrás de todo esto sigue estando la misma persona, la suma sacerdotisa y archimaga de la nigromancia.

Aunque el culto a Osrun es el predominante, también hay templos a otras deidades como Ashimet y Kalar, algo que no es único en el continente, pero las personas que los siguen lo pueden hacer abiertamente, sin esconderse. En el templo de Ashimet se pueden conseguir los servicios de algunos de los gremios criminales, los clérigos estarán encantados de ser los mediadores en los contratos y en hacer cumplir a ambas partes de sus deberes.

En las afueras de la ciudad se encuentran los cuarteles, en ellos se entrena a los hombres y mujeres que formarán parte del ejército. Los Caballeros de Hueso son sus oficiales y se encargan del entrenamiento de todos los guerreros que defenderán Osario de los ataques exteriores. Estos guerreros saben que la muerte no termina con su servicio, ya que los clérigos de Osrun los acompañan en el combate y saben que una vez hayan caído volverán a ser alzados para mayor gloria de su dios.

Información General

Gobierno: Halmana Aimterr no solo es archimaga y suma sacerdotisa, también es la reina indiscutible de Osario. Esta elfa solar cuenta más de novecientos años, pero se mantiene joven gracias a la magia. Es una mujer implacable e inteligente, sobre todo es constante. Su objetivo es vengarse de sus semejantes, así como de los Ridalenses a los cuales culpa de que haya tomado ciertas decisiones en su vida.

Otros centros de poder: Nadie en Osario discute el gobierno de Halmana. Sin embargo, existen ciertos grupos que por debajo de la mesa intentan garantizarse una posición, y de paso, unos ingresos. Este es el caso de Rihat Nikanuur, clérigo de Ashimet que no solo gestiona contratos, también tiene bajo sus órdenes a muchos agentes de la Pluma Roja y de otros gremios.

Población: Nuar’tal’reg cuenta con una población superior a los 40.000 habitantes y que sigue creciendo a paso lento pero continuo.

Guardia: Para mantener la paz dentro de la ciudad existen 5.000 guardias. Pero lo importante es el ejército acuartelado en las afueras, ya que cuenta con más 20.000 soldados, aunque no siempre están todos.

Las Torres de Nigromancia
Ver una de estas torres es una experiencia, aunque cada una de ellas tiene un aspecto diferente, básicamente todas se han construido de la misma manera. En realidad, las torres son un enorme muerto viviente que nace de un cadáver durante un largo ritual que pone a prueba la resistencia de los magos y clérigos que lo llevan a cabo. En el caso de la torre de Nuar’tal’reg, Halmana y Osrun (ya siendo liche y antes de convertirse en dios) utilizaron el cuerpo de su compañera Sina para erigir la torre. Durante el ritual el cuerpo de Sina se fue deformando y creciendo, su carne muerta se clavó en la tierra buscando los restos de otros seres muertos, con la suerte de encontrar los huesos de enormes animales ya desaparecidos sumando sus restos a la construcción.
En Nuar’telag, los nigromantes utilizaron los restos de guerreros, magos y clérigos caídos. Cualquiera que vea la torre desde el exterior, si mira atentamente verá como las paredes tomas el aspecto de esos caídos y como se mueven subiendo y bajando por ellas. Al estar en mitad del desierto de cristal, la luz del sol se refleja en las paredes quemando la carne y hueso que la forma, abriendo a veces heridas que dejan caer la sangre corrupta de lo que fueron sus materiales de construcción.

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