Los Robledal son víctimas de un complejo de inferioridad que no dejan de transmitir de padres a hijos. Obligados a situarse más al Sur que el resto de las familias y con la suerte de encontrar tierras más ricas para la agricultura, pero con el constante miedo a acciones por parte del imperio Orco de Uhutolouk, los Robledal decidieron huir hace poco más de quinientos años de la zona actualmente ocupada por Aglessir para no sufrir el mismo fin que los Friosa, asesinados por encargo de los Agraciada al entrever un futuro competidor en el lucrativo negocio del cuidado de los enfermos.
Este ducado está tomado por las fuerzas militares de los Robledal. Una fuerza constante que patrulla las fronteras para prevenir ataque de los orcos… y del resto de familias.
Herreros de fama mundial y mecenas de inventores de máquinas bélicas, los Robledal son tratados con indisimulado desdeño por el resto de las casas.
La paranoia de los Robledal ha beneficiado muchísimo a la (corrupta) Iglesia de Ashet pues ha establecido docenas de bastiones con guarniciones de la Hueste Sagrada. Soldados especializados en camuflaje, incursiones en la sombra, sabotaje y asesinatos sin rastro que acceden con facilidad a los territorios del ducado de Eisara sin llamar la atención.
Esto es especialmente cierto tras la Matanza del Consejo. Lano y Peica Robledal ordenaron la construcción de fortificaciones y murallas en toda la frontera y esto ha provocado más de un altercado que, hasta la fecha, no ha escalado a más. El sabotaje de los campesinos (que pagan cada vez más impuestos) y la muerte de buena parte de las levas que se sumaron al Sacro Ejército han supuesto que ninguna de estas edificaciones se esté llevando a cabo al ritmo previsto, las arcas del ducado están prácticamente vacías y el malestar en las calles de ciudades y villas es generalizado.
Los gobernantes, perdiendo los nervios, han iniciado una gira por las poblaciones donde presiden actos de ajusticiamiento público en las plazas mayores que visitan. El caldo para un golpe por parte de alguno de sus vecinos está en su punto de cocción.
Información General
Gobierno: Toda Ley que afecte exclusivamente al Ducado de Robledal emana de la casa epónima. Actualmente el matrimonio de Lano y Peica Robledal (primos segundos) gobiernan mediante terror y violencia donde faltan razones y justicia. Las ejecuciones y los escarnios públicos son habituales.
Otros centros de poder: la (corrupta) iglesia de Ashet muestra un claro apoyo a la ciudadanía, que se ve asfixiada por las levas forzadas y los altísimas tasas e impuestos. Los asentamientos más alejados de la capital solo están nominalmente bajo el mando de los Robledal pues son feudos de la Hueste Sagrada.
Población: Las poblaciones suelen reunir entre tres y seis mil almas, muchas arracimadas alrededor de las fortalezas de la Hueste Sagrada. Las ciudades, donde el control de los Robledal es real, parecen asentamientos militares diseñados milimétricamente, con poca variación de uno a otro. Además de un evidente predominio de humanos, pueden verse gnomos (valorados por su pericia manejando y manteniendo máquinas de guerra) y medianos.
Producción: Armas, máquinas de guerra, vehículos bélicos y protecciones varias se venden a todo el continente. Piezas de herrería y orfebrería alcanza altísimos precios dentro y fuera d ellos Seis Ducados.
Guardia: Aparte del ejército que mantiene la familia en las inmediaciones de la capital y a lo largo de la frontera hay numerosos bastiones de la Hueste Sagrada en toda la región.