Las Llanuras Baldías

Lo que ahora se conoce como las Llanuras Baldías, antaño fue una estepa de grandes pastos y territorio de un próspero reino llamado Lendaria. Este reino estaba ligado a Ridalia, ya que sus antiguos reyes eran familia de los Goldentree de Ridalia.
Varios siglos atrás en un furor expansionista del Osario, los nigromantes lanzaron una gran ofensiva sobre Lendaria destruyendo todo a su paso. La invasión fue rápida, en apenas unas pocas semanas los retornados habían destruido todas las poblaciones hasta las colinas Besir, ya en la frontera con Zahirinia. La fortaleza de Besir, el puesto fronterizo más grande de Zahirinia en el sur terminó cayendo, pero las tropas combinadas de varias ciudades lograron detener su avance.
Poco tiempo después los nigromantes ordenaron la retirada de los muertos, regresando a la seguridad del Osario tras la cordillera del Muro. Durante el proceso de retirada muchos de los retornados se extraviaron y siguen vagando por esas tierras en busca de carne fresca con la que alimentarse. A veces se juntan grupos un poco más grandes de lo habitual y en su frenética búsqueda de comida se dirigen al bosque de Gennala o Anhaern.

Las colinas Besir

A pesar de que Besir y sus colinas pertenecían a Zahirinia, actualmente es considerado parte de estas tierras y como un territorio de gran importancia para su reconquista.
Una coalición de naciones liderada por Ridalia y Areslya, junto a Canendav, Daheron, Tarinz-En y las ciudades estado de Zahirinia han trazado un plan para reconquistar las Llanuras Baldías. Y todo el plan comienza por limpiar y asentar las colinas Besir y la abandonada fortaleza del mismo nombre.

Te preguntarás ¿de qué va el plan? El plan consta de varias fases, la primera es enviar a grupos de aventureros a explorar la zona limpiando de retornados y de posibles amenazas. Esta parte del plan dará pie a una campaña de exploración de hexágonos donde los aventureros deberán explorar el entorno y enfrentarse a los seres que vagan por él. Con el tiempo deberán crear un punto seguro desde el cual seguirán con sus trabajos de exploración.
El plan continuará con la llegada de los soldados de las naciones aliadas y que reforzarán los puntos asegurados por los aventureros, para más tarde dirigirse a los lugares más peligrosos y eliminar las amenazas.
La última parte del plan es reconstruir las antiguas fortalezas y eventualmente reconstruir las poblaciones para que la tierra vuelva a generar lo necesario para no depender de suministros externos. A partir de ese momento todo el territorio estará en alerta siempre. Pero tener vigiladas las actividades de los nigromantes y sus huestes es fundamental.

El Río Zingolor

Este es el río que marcaba la frontera entre el reino de Lendaria y Zahiniria, un largo río que recorre de oeste a este hasta desembocar en el Océano de las Tormentas. En su día, las mejores tierras de cultivo de extendían a sus orillas y servía como un camino desde el interior hasta la costa. Antiguamente existían varios puentes que permitían el paso de un lado a otro, pero se desconoce si siguen en pie.

Las ruinas de Soledad

Soledad fue la capital de Lendaria, una importante urbe costera llena de mercados y con un puerto mercantil lleno de vida. Hoy no son más que un enorme montón de ruinas que pueden verse desde el mar. Nadie se ha aventurado a recorrer de nuevo sus calles. Como suele ocurrir, casi todo lo que cuentan de una ciudad en ruinas son chismes y leyendas, Soledad no es una excepción. Sobre una colina se alza el antiguo castillo del rey, los rumores dicen que ni los nigromantes fueron capaces de encontrar la cámara del tesoro, pero lo más probable es que haya sido saqueado hace siglos.

Las ruinas de Bortune

La fortaleza de Bortune era el fortín encargado de la vigilancia del paso a El Osario y la primera en caer cuando la ofensiva se inició. A pesar de ser una fortaleza militar, a su alrededor creció una pequeña población, se creé que se refugiaron tras las murallas y que todos murieron allí, para más tarde ser reanimados como zombis y marchar hacia su siguiente objetivo.

Las colinas de Halueth

Es una zona abrupta y peligrosa, con escarpados riscos y grutas interminables. Aquí resistieron durante semanas los pocos soldados que escaparon de Bortune con los refuerzos llegados desde Jatala. La leyenda dice que un dracoliche llegado desde el sur arrasó las colinas con su fuego mágico, quizá sea por lo que las rocas de estas colinas parecen quemadas y ennegrecidas. Estas colinas son las que peor fama tienen entre aquellos que cuentan historias de las llanuras y dicen que las colinas están encantadas por las almas de los que allí murieron.

Las ruinas de Jatala

En su día, esta ciudad fue casi más importante que Soledad. Ubicada en mitad de una provincia con tierras ricas para el cultivo y pastos interminables para el ganado. Las corrientes marinas traían grandes bancos de peces dos veces al año y por no hablar de la época del salmón. Era una ciudad realmente rica. Durante la invasión fue la encargada de abastecer a los ejércitos defensores hasta que definitivamente cayó tras unos pocos días de asedio. Las historias de los supervivientes terminaron transcritas en los libros de los historiadores y pueden encontrarse en las bibliotecas de los templos a Elenne, pero sus relatos no son agradables de leer por la matanza que describen.

Las llanuras ahora

Debido a la inexistente actividad humana estas tierras han vuelto a un estado salvaje, muchos de los rebaños que antaño estaban domesticados ahora sus descendientes campan a sus anchas en libertar. Enormes manadas de caballos viajan de un lado a otro de las llanuras en busca de pastos y agua fresca, pero sobre todo huyendo de los depredadores que han vuelto. Pero de todos estos depredadores, el peor sigue siendo el retornado. Algunos vagan por las llanuras antaño abandonados por sus creadores, otros han dejado el Osario siguiendo el aroma de la carne viva. Otros son fantasmas y espectros de aquellos que murieron en las ciudades odiando su actual existencia. Pero de lo que muchos están seguros, es que Nyzzaerrol, el maldito dracoliche que arrasó tantos lugares aún sigue oculto en algún lugar de las llanuras.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *