O la Primera Ciudad de la Arena como suelen llamarla a veces los enanos. Cuando los primeros Vinar llegaron a Ausir, lo primero que encontraron fue estas montañas, y no dudaron en hacer de ellas su hogar. Tras las primeras prospecciones encontraron agua bajo la superficie y lo que es más importante, grandes depósitos minerales para construir su nuevo hogar.
En vez de cavar hacia abajo decidieron subir hacia las cimas buscando el hierro que necesitaban para sus herramientas y armas. Al llegar a las cimas nevadas del centro del macizo encontraron restos de una antigua civilización. Las paredes de las ruinas estaban repletas de inscripciones, pero totalmente indescifrable para ellos. Aprovecharon estas ruinas para construir a su alrededor creando altas torres que les permiten ver todo el desierto.
Mientras tanto, siguieron cavando en el interior, crearon zonas habitables y nuevas galerías para explotar los minerales y piedras preciosas.
Al excavar fueron accediendo a las capas freáticas, construyeron canales y acueductos, presas que dieron lugar a lagos subterráneos. Sin embargo, estas montañas no contienen tanta roca cristalizada y la luz es incapaz de entrar, por lo que dependen de las piedraluz para iluminar sus galerías y lugares comunes.
Los enanos además de tozudos e ingeniosos también son curiosos. Una parte de ellos se han centrado en estudiar las antiguas ruinas que encontraron, buscando desesperadamente una forma de leer o traducir las inscripciones, pero hasta ahora les ha sido imposible. No tiene correspondencia o parecido con ninguna otra lengua de Zhirsanaq. Esta frustrante situación ha derivado en que los más sabios haya invitado a estudiosos de otras naciones para encontrar un significado a dichas inscripciones. Ese grupo de estudiosos saben que hay más ruinas de esa misteriosa civilización bajo las arenas del desierto, han financiado muchas expediciones, pero en muchos casos esas expediciones han desaparecido por que esas ruinas están habitadas por dragones azules o behires a los que no les gustan las visitas. Otras expediciones si han logrado regresar con algunos elementos como vasijas, orfebrería y a veces armas antiguas. Nada de ellos les ha ayudado a descubrir quienes eran estos seres. Estos investigadores se llaman a sí mismos Reveladores.
Información General
Gobierno: La ciudad y sus alrededores están gobernados por Votgroik Lodagar, un anciano tío abuelo del rey Aleam. A pesar de su avanzada edad se mantiene firme y solo dejará el cargo una vez haya muerto, y eso que el consejo le ha instado muchas veces a dejar el cargo y ceder el sitio a un líder más joven.
Otros centros de poder: El consejo de ancianos, a pesar de querer al viejo Votgroik en su retiro, le apoyan en la mayoría de las decisiones. Han buscado sucesores en todos los clanes y tienen a varios candidatos. Los Reveladores se han convertido en un grupo con cierto poder dentro de la ciudad, ya que la mayoría de sus integrantes son ricos comerciantes. Aun así, no pretenden cambiar la política de la ciudad o el reino, les basta con que puedan seguir con sus investigaciones.
Población: Aunque la ciudad es extensa tanto bajo la superficie como en las cumbres, no está tan poblada como la capital. 15.000 enanos pueblan la ciudad entre comerciantes, mineros, constructores, pastores y agricultores.
Guardia: Actualmente la guardia de la ciudad está compuesta por 1.000 enanos, se encargan de mantener el orden dentro de la ciudad y patrullar el área cercana. Una parte de ellos vigilan el horizonte desde las altas torres de las cumbres en busca de dragones que puedan amenazar la ciudad.