Un nuevo peligro: la hibridación
Desde la llegada, Isola ha fomentado el intercambio cultural y el comercio, una forma de conquista a largo plazo, pero mucho más segura que la guerra. Pero este sistema también tiene sus defectos y algunos de ellos debían ser evitados incluso antes de que sucedieran. Los Arnotari son conscientes de la compatibilidad genética del ser humano con su especie y por lo tanto era posible que con el intercambio cultural se produjeran contactos no permitidos entre ambas especies. Isola temía que el surgimiento de híbridos pudiera poner en peligro su objetivo y por ello antes de la Llegada se advirtió de que esa situación no sería tolerada, el híbrido sería destruido y sus padres castigados severamente. Sin embargo, no contó con un factor importante, el amor. Así es, Algunas relaciones se estrecharon tanto que al final ocurrió lo que Isola tanto temía. Algunos Arnotari comenzaron a relacionarme más de lo habitual con los humanos, aprendieron mucho de la cultura y estrecharon lazos con el sexo opuesto.
Al principio solo fueron casos aislados, pero a mediados de la década de 2030 comenzaron a llegar informes de deserciones de ambos sexos entre las filas de los Arnotari. Aunque la ley promulgada por el representante Isola obligaba a la destrucción de los híbridos, en realidad se convirtieron en objeto de estudio alejados de sus padres. Los desertores junto a sus parejas se refugiaban en aquellos lugares donde los Arnotari no podían llegar, incluso entre los grupos de la Resistencia, colaborando con ellos para que un día sus hijos pudieran ser libres.
Se desconoce cuántos de estos hijos híbridos existen, pero se cree que deben existir varias decenas de ellos repartidos por todo el mundo, más aquellos que están retenidos en las naves siendo objeto de experimentación.
Pero no son solo los Arnotari quienes tienen interés sobre estos híbridos, también los científicos humanos. Se rumorea que estos híbridos tienen poderes sobrenaturales relacionados con las capacidades psíquicas, pero esto por ahora solo son habladurías entre los miembros de la Resistencia y en los círculos cercanos a los Arnotari. Sin embargo, tener de tu lado a personas con este tipo de cualidades siempre será una ayuda o un arma que blandir frente al enemigo. Quizá sea por esto mismo que los Arnotari los persiguen con mayor intensidad durante los últimos años.
Según las investigaciones a las que algunos miembros de la Resistencia han tenido acceso, la apariencia de estos híbridos depende mucho de un factor clave, la madre. Si la madre es humana, la apariencia del híbrido es mucho más cercana a la humana, pasando por humano a primera vista. Una revisión más en profundidad revelará que los pabellones auditivos no corresponden con la humana y si con la Arnotari, por ejemplo. En el caso de que la madre sea Arnotari, su aspecto es más alienígena pero el color del iris de sus ojos le delatará. En ambos casos el color de la sangre corresponde mucho más con la Arnotari.
A todo esto, muchos Arnotari dentro de los estamentos científicos han comenzado a plantearse si este no debería ser el futuro de su especie, unirse a los humanos y crear así una nueva especie que pueda prosperar durante los próximos milenios. Pero está claro que los prejuicios no son solo defectos de los humanos, porque entre los Arnotari muchos piensan que el fruto de la relación entre ambas especies son abominaciones que atentan contra su civilización e integridad.