Tierras Libres del Este (II): El Bosque de Leinola

Este bosque está encasillado entre las montañas de La Columna y la Sierra Triste, pero además está bordeado por el río Triste y su afluente el río Leinola. Esta situación lo ha convertido en un lugar lleno de vida, aunque sus habitantes son casi exclusivamente animales y algún que otro monstruo. Salvo, claro está, por la tribu de kobolds y los dracónidos verdes que sirven a su señor Zorgerisendrir, un dragón verde adulto con bastante mal carácter, aunque no muy activo por el momento, pero eso puede cambiar pronto.

El bosque de Leinola es un bosque antiguo que ha sobrevivido a todo tipo de catástrofes naturales, desde incendios a erupciones volcánicas. Incluso ha sobrevivido a los ataques de los dragones rojos que viven en los volcanes cercanos. Los árboles más altos son las coníferas, desde pinos y abetos hasta unas pocas secuoyas milenarias. Por debajo de estas y en los lugares más abiertos se pueden encontrar encinas y alcornoques, incluso algunos robles y castaños muy ancianos. Toda una variedad muy extraña para un bosque de este tipo, pero que a sus habitantes les proporciona una combinación perfecta.

Habitantes

Como ya se ha comentado antes, la gran mayoría de los habitantes de este bosque son animales. Precisamente por esto se estableció aquí Zorgerisendrir, le proporcionaba buen alimento y posibilidad de que sus sirvientes dracónidos y kobolds pudieran prosperar sin necesidad de ayudarles.
Los kobolds han excavado túneles bajo el bosque como madrigueras, cada una de ellas aloja a un pequeño clan de no más de cuarenta o cincuenta individuos y siempre en el lado más cercano a la sierra Triste, lugar donde tiene Zorgerisendrir su cubil. Si embargo, los dracónicos prefieren el interior del bosque construyendo sus aldeas y poblados en la superficie o en los árboles más grandes y resistentes.

Mantenimiento de la ley

Aquí no hay más ley que los caprichos del dragón verde y todos están supeditados a sus deseos. Aun así, tanto los kobolds como los dracónidos tienen sus propias jerarquías y de algún modo sus propias leyes.

Vida diaria

Mientras que los kobolds hacen sus vidas bajo tierra cultivando hongos y pastoreando topovejas, pocas veces suben a la superficie, solo lo hacen si son convocados por Zorgerisendrir, cazar o recolectar algún fruto. Los dracónidos a pesar de estar más centrados en entrenarse como guerreros también tienen sus pequeños cultivos. Al contrario que sus vecinos prefieren cazar y no pastorear.

Amenazas

La mayor amenaza para los habitantes del bosque, incluido su señor son los dragones rojos que viven en los volcanes cercanos. De vez en cuando alguno de ellos envía a sus dracónidos para cazar o simplemente para atacar el lugar y obligar a Zorgerisendrir a salir de su guarida. Más tarde o temprano alguno de los dos se decidirá a atacar para quedarse el territorio.

Información General

Gobierno:  Zorgerisendrir es el dueño y señor del lugar.

Otros centros de poder: Nadie más ostenta aquí poder, aunque cada poblado o madriguera tenga su propio jefe de clan, nadie está por encima del dragón.

Población: Esto es realmente difícil de saber, las madrigueras de los kobolds suelen tener entre cuarenta y cincuenta individuos, pero nadie sabe cuántas de estas hay. De los dracónicos es muy posible que haya alrededor de un millar.

Producción: Entre cultivos y ganadería de subsistencia poco se puede saber.

Guardia: Tanto los dracónidos y los kobolds son el ejército de Zorgerisendrir y todos ellos pueden ser llamados para combatir.

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